La consulta ha ido creciéndose y desarrollándose a medida que me ido formando en diferentes disciplinas complementarias y completando mis estudios académicos. Lo que no ha cambiado a lo largo de los años es mi compromiso de atender a las personas que acuden a la consulta, el objetivo de ayudarles desde la máxima honestidad y rectitud con las herramientas que las disciplinas complementarias han puesto en mis manos.
Ahora mismo paso consulta privada en Madrid y Barcelona. La primera semana de cada mes estoy en Madrid, mi ciudad de origen, y el resto del tiempo atiendo en Barcelona, ciudad en la que me instalé en 2014.
CILK
Cilk debe las siglas que componen su nombre a Isabel Leva, la persona con que me inicié en las terapias complementarias, como expresión de mi profundo agradecimiento y como señal del compromiso que adquirí con el conocimiento que me transmitió al comenzar este camino.
Como agradecimiento a Isabel Leva por lo que hizo por mí como paciente, por lo que me enseñó como kinesióloga, por lo que me trasmitió y mostró como maestra. En los 10 años que compartimos hasta su muerte, me admitió como aprendiz y discípula, me dio la posibilidad de aprender como ayudante con ella en la consulta y en los cursos de formación; en esos 10 años, me ayudó a mirarme a mi misma sin temblar y a descubrir lo que se ha convertido en un itinerario de vida.
Como compromiso de cumplir con el vínculo que adquieren maestro y discípulo en pos de algo más grande, en el desarrollo de un saber. En la responsabilidad personal de seguir creciendo como terapeuta, de continuar investigando para poder responder con rigor y conocimiento a las necesidades que tiene la persona que acude a la consulta que es, en última instancia, la persona a quien le debo la máxima honradez, honestidad, respeto y eficacia de las que soy capaz.
El Impulso
Unos meses antes de la muerte de Isabel Leva, con motivo de una conversación entre Isabel y yo sobre cómo entendía ella la kinesiología y de qué manera su perspectiva difería de las prácticas habituales de esta técnica, Jimmy Flores, nos propuso crear una web que sirviera para difundir la singularidad de nuestra perspectiva y como plataforma para un futuro centro. Su singularidad se debía, por una parte, al rigor y a la profundidad con que Isabel acometía el trabajo en las sesiones; y, por otra parte, a que centró sus investigaciones y su aproximación terapéutica en revelar los elementos psíquicos e integrarlos con los aspectos físicos y energéticos que constituyen a la persona.
Isabel se ilusionó con el proyecto y dio el visto bueno, pero me pidió un poco de tiempo ya que se encontraba débil. Su frase fue: “dame un par de meses Belén y nos ponemos con ello”. Aproximadamente un par de meses después Isabel Leva murió, el 18 de mayo de 2009. La página, a la espera del contenido, quedó olvidada por el desorden que provocan algunas muertes, como las de los maestros.
No volví a pensar en ello, hasta que la página cobró vida el septiembre siguiente, a través de lo único que funcionaba, el correo de información: un paciente buscaba a Isabel.
En ese momento supe que me correspondía seguir con el proyecto.
Agradecimientos
Agradecer, en primer lugar, a Isabel Leva su confianza en mi como alumna, ayudante y terapeuta.
A Jimmy Flores, por ser el impulsor de esta página web y también por su incondicional apoyo personal y profesional a lo largo de todos estos años.
A la familia de Isabel por darme permiso para usar su nombre y por donarme todo su material después de su muerte. A Amelia, amiga personal de Isabel, que me animó a hacer pública la web. A los últimos alumnos de Isabel, por confiar en mi como profesora para terminar la formación en kinesiología, que se vio interrumpida por su fallecimiento.
A todos los demás profesores que han venido después, a los alumnos nuevos que han confiado en mi y en, especial, a las personas que acuden a la consulta y que confían en trabajo que allí hacemos juntos.
Por último, agradecer a todos quienes han sido mis terapeutas, que no sólo me han ayudado en mi cuidado y desarrollo personal, sino que también me han descubierto otras técnicas en las que me he terminado formando por haber experimentado en mi sus beneficios.
Isabel Leva
In Memoriam · 1947-2009
Isabel Leva dedicó gran parte de su vida a la kinesiología, a su investigación, a la formación de unos pocos kinesiólogos, todo a ayudar a las personas que acudían a su consulta desde la más honesta entrega y desde su vasta sabiduría. Su manera de entender y practicar la kinesiología hizo que desarrollara su propia metodología e investigaciones.
Si algo definía a mi maestra era su profunda sensibilidad intuitiva unida a una incisiva practicidad realista. Tenía como norma inquebrantable la honestidad máxima del no engañarse ni permitirse despistarse, sino hundir bien los pies en la raíz del problema para poder comprehender y transformarlo con conciencia. No hacía concesiones. Esta rectitud hacía de ella una persona determinada, vehemente, apasionada, lúcida y a veces brusca; pero, sobre todo, terriblemente compasiva, sensible, entregada a la ayuda y generosa.
Desde finales de los años 60, Isabel se había interesado y formado en campos muy nuevos en occidente y casi inexistentes en nuestro país, en especial sistemas médicos orientales como la medicina china que estudió con Hailiang Saebe, la acupuntura que aprendió con José María, o la medicina taoísta en la que se formó con diferentes maestros, Mantak Chia, Ronald Diane, Juan Li y Cho Ming. A lo que hay que añadir el gran interés que tenía por la física, en especial la física cuántica, perspectiva teórica que incluía en su trabajo y disciplina de la que era autodidacta.
A finales de los años 80, Isabel Leva comienza su camino como kinesióloga de la mano de su profesor de acupuntura, José María; cambia su carrera y trabajo por un mundo que ella define como apasionante, la kinesiología. Su formación como kinesióloga tiene dos figuras principales: el Dr. Sheldon Deal y Raphael Van Assche. Estudia con el Dr. Deal en los seminarios que tienen lugar en Madrid desde finales de los años 80 hasta mediados de los 90, fechas en las que el Dr. Sheldon Deal deja de venir a España de forma regular. En 1990, empieza su formación con Raphael Van Assche, al que debemos el AR y es el fundador de la Kinesiología Holística, a cuyos seminarios seguirá asistiendo hasta el final de su vida.